Pie de foto: La foto policial de Dilma capturada, torturada y encarcelada por los esbirros de la bárbara dictadura militar pro imperialista con la banda presidencial que lleva desde hoy.
Con un carácter de mujer luchadora y combatiente, una guerrillera que defendió los derechos de los explotados y marginados (siendo por esto perseguida y torturada durante veinte y dos días) a lo largo de su vida ha llegado a asumir el cargo de Presidente de Brasil.
Integró junto a su padre (comunista belga) el movimiento contra la dictadura brasileña de los años sesenta.
Posteriormente pasa a formar parte del grupo guerrillero “Vanguardia Armada Revolucionaria Palmares”.
Ex ministra de Lula y actualmente Presidenta de la República Federal de Brasil, primera mujer en asumir este cargo dentro del país y tercera en nuestra Latinoamericana.
Asumió el cargo el primero de enero de este año, refiriendo su discurso a honrar a las mujeres, proteger a los más frágiles y gobernar para todos.
Respaldada por el Gobierno más femenino en la historia del país, con cinco Ministras y cinco Secretarias de Estado.
El haber llegado a tan importante puesto constituye un paso gigante de transición en la historia Latinoamericana, un suceso que suprime el falocentrismo. Rousseff, como primera mujer Presidente de Brasil, tiene una gran responsabilidad que deberá asumir con decisión: El llamar al resurgimiento de las mujeres, quienes hemos sido y somos doblemente explotadas por este monstruo de mil cabezas denominado sistema capitalista.
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- Frente Unido de Mujeres
- Organización politica que lucha por la emancipación de la mujer y la sociedad en su conjunto.
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“La llamada de la tierra”
¿Me han usurpado mi tierra?
¿Me han privado de mis derechos, y me voy a quedar aquí, uncido al exilio, humillado y desnudo?
¿Me voy a quedar aquí a morir como un extraño en tierra extraña?
¿Me voy a quedar? ¿Y quién lo ha dicho? Volveré a la tierra amada.
¡Por supuesto que volveré! Y allí se cerrará el libro de mi vida.
¿Me voy a quedar aquí a morir como un extraño en tierra extraña?
¿Me voy a quedar? ¿Y quién lo ha dicho? Volveré a la tierra amada.
¡Por supuesto que volveré! Y allí se cerrará el libro de mi vida.
Se apiadará de mí su tierra generosa y dará cobijo a mis cenizas.
¡Regresaré, es necesario que vuelva!
¡Regresaré, comoquiera que sean mis desgracias!
Mas siguió desterrado, observando su tierra y murmurando: ¡Es necesario que vuelva!
Mientras, agachaba la cabeza en la tienda, cerrando el alma a su oscuridad, cerrando el pecho a su desgracia.
Pero seguía estando ahí, fija, esa idea, zumbando febril y silenciosa, hirviendo y ardiendo en su cabeza, quemando, como el fuego, sus sentidos:
¡Regresaré, es necesario que vuelva!
¡Regresaré, es necesario que vuelva!
¡Regresaré, comoquiera que sean mis desgracias!
Mas siguió desterrado, observando su tierra y murmurando: ¡Es necesario que vuelva!
Mientras, agachaba la cabeza en la tienda, cerrando el alma a su oscuridad, cerrando el pecho a su desgracia.
Pero seguía estando ahí, fija, esa idea, zumbando febril y silenciosa, hirviendo y ardiendo en su cabeza, quemando, como el fuego, sus sentidos:
¡Regresaré, es necesario que vuelva!
Por. Fadwa Tuqán.
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